
Estrellas que cuentan historias V
Por fin vamos a saber qué ocurrió con Perseo y Andrómeda y, lo más importante, conoceremos el castigo a la vanidad de Casiopea.
La historia continúa así: recordad que cuando Andrómeda ya estaba atada con cadenas a una roca del acantilado llego Perseo para salvarla.
Primero debemos saber quién era Perseo y por qué se dio la casualidad de que pasara por allí; Perseo era un semidios hijo de Zeus y de la mortal Danae, hija del rey de Argos, Acrisio.
Acrisio, al enterarse de una profecía que auguraba que su nieto lo iba a matar, hizo encarcelar a su hija para mantenerla virgen. Sin embargo, Zeus logró entrar en su prisión y dejarla embarazada.
Al enterarse Acrisio, hizo que lanzaran a su hija y su nieto al mar en una caja de madera. Pero ambos consiguieron sobrevivir y llegaron a la isla de Séfiros, donde fueron bien acogidos por su rey; este rey estaba profundamente enamorado de su madre y una y otra vez le pedía matrimonio. Ella siempre tenía una excusa para decir que, por ahora, mejor no.
Cuando Perseo creció, el rey de Séfiros, le pidió un presente para su boda y Perseo accedió a llevarle la cabeza de la gorgona Medusa a cambio de que no se casase con su madre.
Medusa era un monstruo de grandes dientes, serpientes en lugar de cabellos y con la habilidad de convertir en piedra a todo aquel que la mirase directamente.
Originalmente, Medusa era una bella sacerdotisa de Atenea que, al ser violada por Poseidón, la transformo en semejante cosa. Otra versión indica que, al ser tan bella y presumida, llego a decir que era más bella que la propia Atenea, tras los cual recibió su castigo.
Atenea, al enterarse de la misión de Perseo, le dio un escudo reflectante para ver a Medusa indirectamente. También Hermes le ayudo dándole unas sandalias con alas y una hoz para decapitarla y Hades le cedió un zurrón para guardar su cabeza y un yelmo con el don de la invisibilidad.
Tras haber decapitado a Medusa y haber recorrido un largo camino lleno de peligros y aventuras, Perseo llego a las costas de Palestina donde vio atada a Andrómeda ante Cetus y se enamoró de ella.
Entonces hablo con sus padres y les pidió la mano de su hija si conseguía matar al monstruo y ellos accedieron no de muy buena gana.
Perseo derrotó a Cetus convirtiéndolo en piedra, ya que se las ingenió para mostrarle cabeza a Cetus.
Tras el rescate, Andrómeda insistió a sus padres para celebrar la boda cuanto antes en agradecimiento a Perseo. Sin embargo, durante la celebración del enlace apareció Agenor, el cual Cepheo y Casiopea le habían prometido la mano de su hija con anterioridad.
Agenor llego además con un grupo de hombres para matar a Perseo durante la boda y durante la lucha y en un momento de desesperación, este sacó la cabeza de Medusa y convirtió a sus rivales en piedra, incluidos a Cepheo y Casiopea.
No queriendo dejar a Casiopea sin castigo, Poseidón la situó en los cielos atada a un trono en una posición tal que, al rotar la bóveda celeste, queda cabeza abajo la mitad del tiempo.
Deseamos que os haya gustado tanto como a nosotros. Durante los próximos días identificaremos a los personajes de los que hemos hablado mientras conocíamos a Casiopea, los localizaremos en el cielo para encontrarlos fácilmente y realizaremos nuestras representaciones en cartulina para poder verlas y buscarlas en nuestra casa cada vez que nos apetezca pasar una noche de estrellas.
¡¡Hasta la próxima!!